Valentina Altamura

Rodeada de quienes me deseaban como profesora de letras, después del bachillerato clásico, desatendiendo muchas expectativas, me inscribo en la facultad de ingeniería de telecomunicaciones en el Politécnico de Milán. Inicialmente solo por el deseo de ir contra corriente, luego me apasiono tanto por la materia que me gradúo en 2013 con la máxima calificación.

Después de algunos meses como investigador en la universidad, en 2014 comienzo mi experiencia en Fastweb como Project Manager (PM) en el grupo de Technology Planning. Desde aquí, ladrillo a ladrillo, construyo no solo mis competencias técnicas sino que también perfecciono las relacionales, fundamentales para un trabajo en equipo eficaz. Así, el año pasado llego al grupo de Network Engineering, donde inicio una nueva y definitivamente desafiante aventura.

El objetivo diario que me planteo es mantener siempre alto el intercambio interpersonal de competencias y conocimientos. En mi equipo, por un lado, busco adquirir siempre una mayor competencia técnica de alto detalle sobre arquitecturas y topologías de red; por otro, pongo al servicio de todo el grupo la experiencia y las habilidades blandas desarrolladas a lo largo de los años como PM.

Al ámbito laboral se suman diversos pasatiempos que, aunque en apariencia se distancian mucho del rigor de la ingeniería, en mi opinión están estrechamente relacionados.

Amo el deporte y la cocina: ¿qué puede ser más preciso y metódico que equilibrar perfectamente los ingredientes para un postre de excelente resultado, o medir tiempos y velocidades para una carrera de running?

El consejo que he recibido y que me siento en la obligación de reiterar es: nunca permitas que nadie te diga que "quizás sea mejor que hagas otra cosa" o "no creo que este sea tu lugar" o "se espera que sigas otro camino", porque quien es ingeniero de corazón, lucha con constancia, estudia con dedicación y también lo demuestra en el exterior.