Imaginen un mundo en el que los drones que entregan comida puedan ser consumidos como postre. Imaginen una píldora que puede monitorear su salud desde el interior, y que es segura y biodegradable. Imaginen robots comestibles que podrían proporcionar nutrición vital en caso de emergencia. Este es el futuro de la electrónica comestible.
Esta tecnología revolucionaria combina la ciencia alimentaria y la robótica, creando dispositivos que pueden ser ingeridos, digeridos y eliminados de manera segura. Pero, ¿cómo funciona realmente la electrónica comestible? ¿Qué otras aplicaciones podrían surgir?
Lo hablaremos el lunes 24 de junio a las 18:00, en Zoom, en compañía de Valerio Galli, estudiante de doctorado en Física en el Politécnico de Milán & IIT.