El concepto de seguridad, sobre todo en una época de pandemia como la actual, puede y debe interpretarse de diferentes maneras. Para atender al universo femenino que presenta especificidades económico-sociales, profesionales, de edad y de vida.
El encuentro tiene como objetivo hablar sobre la seguridad de las mujeres en la ciudad metropolitana, partiendo de la consideración de que, para sentirse seguras "dentro", es decir, en su ámbito privado, es necesario que existan, al mismo tiempo, formas de protección institucional "fuera", en la comunidad ciudadana.
Se piense, por ejemplo, en el funcionamiento eficaz de los servicios sociales capaces de proteger las necesidades de las ciudadanas en momentos de particular dificultad. Se añada la seguridad en el mundo laboral, en la empresa y en las formas de trabajo “ágil” que, en los últimos tiempos, han sustituido el trabajo presencial.
Seguridad también con ciudades más iluminadas, con transportes públicos y privados que favorezcan soluciones de “movilidad protegida” para las mujeres (ejemplo “taxi rosa” y servicios nocturnos de algunos vehículos con vigilancia). Seguridad y protección del medio ambiente y del territorio, impulso a la movilidad sostenible, gestión de áreas verdes y carriles bici.
Todos aspectos que, en realidades complejas como las actuales, hacen que una ciudad se sienta "a medida de la mujer".